Presuntamente, este
edificio perteneció a los Romero Rubio, familia política de Porfirio Díaz, sin
embargo, se dice que originalmente el inmueble fue propiedad de los Tovar y
Teresa, quienes posiblemente perdieron su propiedad en una jugada de póker; por
estas razones, su historia ha generado mucha polémica a lo largo de los años;
sin embargo, la mayoría de las personas se refiere a este sitio como la Casa de
Romero Rubio.
Aunque este edificio
originalmente fue concebido para funcionar como casa habitación, durante los
años veinte fue transformado en la sede del Club de Jóvenes del Centro
Deportivo Macabi, organismo que pertenecía a la comunidad judía de México, cuya
labor estaba centrada en la organización de diversos eventos a lo largo del
año.
De este modo, la Casa
de Romero Rubio alojó innumerables eventos durante aquella época, siendo el
lugar en el que se llevaron a cabo obras de teatro, juntas, conferencias y
disertaciones acerca de las ideas más modernas de aquel entonces; de igual
modo, el lugar era conocido por los famosos bailes dominicales que se llevaban
a cabo periódicamente.
En la actualidad, la
Casa de Romero Rubio sobresale por su bello interior, cuyo diseño hace las
delicias de los visitantes; de manera especial, el Salón de los Espejos y el
Salón de los Arcos son los más representativos, cuyos elementos decorativos se
manifiestan como una bella alegoría de la suntuosidad porfiriana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario